Partidazo se vivió en el Camp Nou. El Sevilla soñó y ganó su quinta Copa del Rey ante un Atlético sin puntería que dispuso de más oportunidades de marcar pero que no supo aprovecharlas. Un inspirado Palop y la segura defensa del Sevilla frustraron continuamente las ocasiones del Atleti. Sin duda alguna el Sevilla ha ganado esta final meritoriamente. Tanto los aficionados colchoneros como los sevillistas estuvieron sensacionales, sin cometer ningún altercado, eso sí, animando y dejándose las gargantas en el estadio por sus respectivos equipos, y haciendo que el Camp Nou tuviese un gran ambiente.
Las claves.
El Atleti no supo frenar las continuas contras del Sevilla, sus laterales no estuvieron acertados y Navas y Capel aprovecharon esto para poner a prueba continuamente a De Gea y marcar los dos goles del partido.
Los centrales de los dos equipos estuvieron medianamente acertados, ya que ni Forlán, ni el Kun, ni Kanoute, ni Negredo vieron portería.
Zokora-Renato fueron los artífices de que el Sevilla no se viniera abajo y no tuviera despistes. El costa marfileño fue un pulmón, frenando los ataques colchoneros, recuperando balones, y distribuyendo el juego de su equipo. Renato también tuvo una buena noche haciendo que el Sevilla jugase como sabe hacerlo.
Lo Mejor.
Las aficiones se comportaron de manera espectacular dando una lección de cómo se anima a un equipo. Gritaron los 90 minutos, e incluso desde antes de que empezara el partido. Tanto el Sevilla como el Atleti pueden presumir de afición. Pese a ser menor el número de aficionados sevillistas, estos, animaron al Sevilla hasta el final, y pese a haber perdido la final, los aficionados colchoneros siguieron cantando a su equipo como si la hubiesen ganado, algo que hacía años que no se veía por parte del Atlético.
Lo peor.
Mientras los aficionados daban ejemplo de cómo comportarse dentro de un estadio, los jugadores de ambos conjuntos se enzarzaron en una pelea. Fea imagen la que ofrecieron los jugadores. No hay que darle mas vueltas ya que se sabe que en una final hay mucha tensión y siempre saltan chispas, pero deberían de saber controlarse.
El personaje.
El principal artífice de que el Sevilla haya ganado la Copa del Rey es sin duda Andrés Palop, el veterano guardameta valenciano se ha recreado en esta competición haciendo partidazos, como la vuelta de octavos ante el Barcelona. El capitán sevillista ha culminado una gran temporada- su quinta en el Sevilla- con un título. Mejor imposible.
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